Tobos, coletos, mopas, agua, jabón y cloro. Son los implementos de trabajo de Jushedith Venales, una joven de 24 años, estudiante del décimo semestre de Comunicación Social de la Universidad Santa María, que decidió sumarse al personal de limpieza de la misión de Médicos Sin Fronteras que durante la pandemia labora en el Hospital Ana Francisca Pérez de León II de Petare. Aquí nos cuenta, de su propia voz, su experiencia.
Llamémoslo Marco, aunque este no es su verdadero nombre. Es un joven que desde hace 7 años vive con VIH y nadie en su familia lo sabe. Migró a Colombia en 2017, con la idea de trabajar y tener la seguridad de que podría tomar su tratamiento antirretroviral, que en Venezuela ya escaseaba. Pero, al cabo de dos años, sintió que necesitaba un abrazo de su gente, así que volvió a su país por unos meses.
Una familia venezolana quedó varada en Bogotá el 13 de marzo, cuando Nicolás Maduro suspendió los vuelos desde Colombia por la covid-19. Es una pareja con dos hijos que terminaron siendo parte de un grupo de 200 venezolanos a la espera de un vuelo humanitario en medio de una cuarentena muy cerca de su hogar.
Luis Palacios (22 años), presidente adjunto de la Federación de Centros Universitarios de la UCV, estaba preocupado por los estudiantes que, a causa del confinamiento, se quedaron varados en Caracas y Maracay sin poder regresar a sus hogares en otras ciudades del país.
Ayerim Valera es una joven de 32 años que creó, junto a su esposo, una pequeña fábrica de panes de hamburguesas y sándwiches. Junto a sus siete empleados producían aproximadamente 6 mil panes a la semana, pero con la llegada de la pandemia y la escasez de gasolina, ahora la producción alcanza a duras penas a 1 mil.
Diana White es una joven caraqueña de 22 años que hace entrega de productos para los clientes de una farmacia usando sus patines. Se enteró de que en esa farmacia necesitaban personas con bicicletas para entregar los productos a sus clientes. Ella se presentó y ahora hace las entregas patinando por todas las calles de Caracas.
Angélica Áñez estudiaba Comunicación Social en la Universidad de Los Andes. Un día su madre la escuchó quejándose de los atropellos que ella y sus compañeros de clases debían enfrentar. Entonces comenzó a contarle cómo era las cosas unas décadas atrás. En esta historia en audio del #SemilleroDeNarradores asistimos a un diálogo entre dos generaciones.
En abril de 2008, el entonces presidente Hugo Chávez nacionalizó la Siderúrgica del Orinoco, empresa en la que Pedro Candurí trabajaba como obrero. A partir de entonces comenzó un progresivo declive económico de su familia. Por eso, en sus ratos libres, trabajaba como taxista con su carro. Paolis Candurí, su hija, cuenta en este podcast cómo ese oficio enfrentó a su padre con la muerte.
El día que Quiannette Quero cumplió 22 años, invitó a casa a sus amigos y familiares más cercanos para celebrar junto a ellos en una modesta reunión. Después de horas de baile y risas, se encontró en la encrucijada de tener que escoger entre su vida y la de su hermanita de 10 años. Este podcast, producido y grabado por ella misma, es una historia del #SemilleroDeNarradores de La Vida de Nos. Su voz es la voz de muchos jóvenes en la Venezuela de hoy.
Mariana, una adolescente de 17 años, fue a su consulta ginecológica de costumbre. El padre la esperaba afuera y notó que la chica salió muy silenciosa. Esa tarde la chica llegó a casa con unas amigas que la apremiaron a que le contara al padre lo que le había ocurrido dentro del consultorio.