Dos médicos venezolanos, egresados de la Universidad de Oriente, se reencuentran en Buenos Aires, Argentina. Allá se hacen novios y, tiempo después, comienzan a vivir juntos. Con la llegada de la pandemia, sus dinámicas laborales se hacen extenuantes y se ven sometidos a altos niveles de estrés.
Adriana García es ginecobstetra. Cuando su prima —a la que quería como una hermana— le dijo que estaba embarazada, se sintió muy feliz. El embarazo parecía avanzar muy bien, pero en el 5to mes de gestación los médicos le dijeron que la bebé venía con varias malformaciones congénitas. Adriana, consciente de lo que suponía el diagnóstico, deseó no tener esos conocimientos que comenzó a sentir como un peso sobre sus hombros.
Venezuela tiene la 2da tasa de deforestación más alta de Sudamérica, después de Brasil. En 2021, se perdieron 64,4 mil hectáreas de bosque, la mayoría de la Cordillera Andina, de la Depresión Zuliana y de la Guayana venezolana. Todas las especies endémicas corren peligro de desaparecer. Vicente Marcano —biólogo, profesor de la Universidad de Los Andes— descubrió una en el Parque Nacional Sierra Nevada. Aunque dos meses después talaron el único bosque en el que existía, él se resiste a que desaparezca. Este texto resultó ganador de la 5ta edición del Premio Lo Mejor de Nos.
Miembro de una familia de científicos de descollante trayectoria, Klaus Jaffé –químico, doctor e investigador– obtuvo, en 1985, el premio Lorenzo Mendoza Fleury, el galardón de mayor prestigio para la comunidad científica venezolana. Inquieto y reflexivo, siempre quiso comprender los grandes problemas del hombre. Su quehacer científico lo llevó, con el paso del tiempo, al mundo de las ideas: ese que alguna vez quiso que fuera su punto de partida.
Desde muy pequeña aprendió el oficio con el que se ganaría la vida. En Mucuchíes, Margarita Mora Castillo confecciona ruanas, cobijas, tapices para muebles y guantes usando lana tintada con materiales orgánicos. Pero el deterioro de los ecosistemas sensibles de los que toma sus insumos, así como la crisis económica venezolana y la pandemia de covid-19, han impactado en su producción.
La ola de protestas en contra del régimen de Nicolás Maduro que se llevó a cabo en 2014 dejó 43 personas fallecidas. Una de ellas fue Geraldine Moreno, joven de 23 años a quien en medio de una manifestación le dispararon a quemarropa. Su madre, Rosa Orozco, sintió que se quedó sin aire. Y que solo volvió a respirar cuando perdonó a los asesinos. Desde entonces, es activista de la justicia, el encuentro y el perdón.
A petición del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello, la abogada Andrea Santacruz empezó a ayudar a jóvenes detenidos en las protestas en contra de Nicolás Maduro que iniciaron en febrero de 2014. A partir de entonces, comenzó a recorrer un camino que hasta ese momento le resultaba ajeno: el de los derechos humanos.
Hace nueve años, luego de extorsionarlos durante meses, unos policías mataron a uno de los hijos de Aracelis Sánchez y Euclides Farías en una ejecución extrajudicial en los Jardines del Valle. Poco después, en su búsqueda de justicia, nació la Organización de Familiares de Víctimas de Violación de Derechos Humanos (Orfavideh), que acompaña y da seguimiento legal a casos de ejecuciones extrajudiciales, desaparición forzada y tortura en Venezuela.
Un viernes de 2008, Katherine Martínez llegó al Hospital José Manuel de los Ríos, junto a un grupo de personas con las que solía hacer labores sociales, para darles regalos y ánimo a los niños que estaban internados en el principal pediátrico del país. En ese momento supo que tanto ellos como sus familias necesitaban […]
Creció caminando en las calles de Los Palos Grandes, una urbanización del este de Caracas que le parecía muy bonita. En algún momento, Katiuska Camargo se preguntó por qué San Blas, el barrio de Petare en el que vivía y en el que sigue viviendo su madre, no podía estar así de limpio. Muchos se opusieron, pero —con el lema: “El barrio también es ciudad”—, no descansó hasta erradicar los basureros de sus calles.