Luis Guillermo Espinoza, de 15 años, recibió un balazo en la cabeza durante un plantón opositor en San Diego que fue reprimido por la Guardia Nacional Bolivariana, el 5 de junio de 2017. Luego de 74 días en los que luchó por su vida, murió de un paro respiratorio. Luis Guillermo jugaba fútbol desde los 8 años. Era hijo único.