El domingo 9 de febrero de 2003, Ana María Wessolossky, licenciada en computación del departamento de Geofísica de Intevep, recibió una llamada en la que le anunciaban que había sido acusada de terrorista en Aló, Presidente. A pesar de que le recomendaron salir del país, no fue sino 13 años después cuando tomó esa decisión.